Rafael Nadal regresa a la pista central de Wimbledon (tercer turno) tras abandonarla hace dos días con sensaciones extrañas después de un mal comienzo ante el brasileño Thomaz Bellucci, que llegó a dominar por 4-0 en el primer parcial. Su rival de hoy también es un 'top 100', barrera que no rompió hasta el curso pasado. Un año mayor que Nadal en julio cumplirá 27), el checo Lukas Rosol compite por primera vez en el cuadro principal de Wimbledon tras caer en cinco ocasiones en la primera ronda de la fase previa. Tampoco ha cruzado nunca su raqueta con la de Nadal, así que se encuentra ante la experiencia profesional de su vida.

Rosol, un tipo de 1,96 m., que golpea tanto la derecha como el revés con las dos manos, debería sentirse intimidado ante escenario y rival tan imponentes, algo que no le sucederá a Ivo Karlovic en su duelo ante Andy Murray antes de que Nadal y Rosol salten a la pista. El tenista croata, a pesar de encontrarse ya lejos de su mejor momento, sigue contando con un servicio capaz de complicar la vida a cualquiera, más aún en la hierba de Wimbledon. Murray, de momento, ha sabido encontrar siempre la manera de restarle y ganarle el encuentro.

"Karlovic puede poner en aprietos a muchos jugadores. Ahora se mueve mejor y cuenta con una derecha ganadora. También posee ese revés cortado que apenas bota", advierte su compatriota Goran Ivanisevic. "Andy tiene que rezar para que no le alcancen demasiadas bombas. No será un partido bonito para Murray. Puede pasar media hora sin que toque la pelota".

La jornada de hoy cuenta también con los concursos de David Ferrer, ante el francés Kenny de Shepper, otro tipo por encima de los dos metros, 160ª del mundo; de Guillermo García-López, ante Tsonga; de Fernando Verdasco, ante el esloveno Grega Zemlja, o de Anabel Medina, ante la eslovaca Jana Cepelova.