Los mercados de Bilbao ponen máquinas para servir leche recién ordeñada

  • Las expendedoras llegarán a todos los mercados municipales de Bilbao.
  • Surten leche fresca a diario de caseríos de Karrantza.
  • CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE BILBAO
El ganadero Bernardo González saca leche de la expendedora.
El ganadero Bernardo González saca leche de la expendedora.
MART CALLEJA
El ganadero Bernardo González saca leche de la expendedora.

De la teta a la boca, eso siempre gusta. El sabor puro de una leche recién ordeñada. Ya podemos disfrutar de expendedores de leche fresca en los mercados municipales de Bilbao. De momento, sólo el de Deusto está en marcha, aunque en los próximos diciembre y enero se extenderán a todos los mercados de abastos.

La cosa funciona así: hay un expendedor con una manguerita por donde sale la leche. El cliente va con su botella (o la compra una in situ por 40 céntimos). Echa monedas, pone el recipiente, y se lleva la leche a casa. Cuesta un euro por litro, aunque la máquina acepta fracciones. O sea, que se puede comprar también medio litro.

Y no será «ese sucedáneo de leche del supermercado», advierte Bernardo González, presidente de la Cooperativa de ganaderos Bizkaia Esnea (la que ha montado este sistema). La leche del expendedor se rellena cada día con ordeños matutinos en Karrantza.

Nada de vacunos hacinados en una nave industrial. Se trata de las rijosas vacas de 56 caseríos vizcaínos. El ganadero se limita a hervir la leche y llevarla al mercado municipal. Allí se sirve a tres grados de temperatura para que no se pique. Está lista para tomar.

El cliente tiene así la oportunidad de llevarse a la boca un alimento natural, inédito en el tetra-brick. La leche del súper recibe tratamientos para conservarla y abaratarla.

Su supervivencia

Últimamente se habla mucho de la venta directa del  baserritarra al consumidor. Es ahí donde hay que contextualizar la iniciativa de los expendedores de leche. Los ganaderos llevan años con pérdidas porque venden sus productos a los mayoristas por debajo del precio de coste.

Bernardo González, presidente de Bizkaiko Esnea, cuenta que producir un litro de leche les cuesta 42 céntimos. Pues bien, el mercado les paga hoy día 24 céntimos por litro. Con la venta directa en expendedoras, reciben unos 48 céntimos (el resto se va en transporte, tasas...). Conclusión: la venta directa puede salvar su negocio.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento