Madrid.- Muchos de los hábitos laborales que hoy se ven en las oficinas, como trabajar con un horario fijo y librar los fines de semana, guardar fidelidad hacia la empresa durante toda o casi toda la vida laboral o tener un puesto de trabajo estable pronto formarán parte del pasado.

A cambio, nos encontraremos con un modelo de empleo más centrado en la especialización del trabajador, con mayor flexibilidad de horarios, más peso del 'freelance' o autónomo, con más trabajo en equipo y donde se valorará más la experiencia personal que aporta el empleo que el salario neto.

Así se recoge en un estudio de la London Business School firmado por Lynda Gratton, profesora y especialista que lleva varios años analizando las tendencias del mercado laboral. Gratton advierte de que "estamos en un punto de brusca rotura con el pasado", por lo que el trabajo que conoceremos dentro de unos años "es aún muy poco predecible".

El fuerte desarrollo tecnológico, la globalización y los cambios demográficos marcarán las características del empleo del futuro. "Los nuevos retos serán el envejecimiento de la población y el papel de la mujer, que luchará por la paridad en las cúpulas empresariales y por la igualdad salarial", explica Belén Dávila, Responsable regional de Randstad.

La empresa de trabajo temporal enumera las competencias más buscadas por las compañías en sus trabajadores para salir de la crisis y de cara al futuro: debe ser polivalente dentro de ciertas áreas, mostrar compromiso con la empresa, saber trabajar en equipo, contar con dotes de liderazgo, saber gestionar el estrés y los cambios en la empresa y ser una persona innovadora.

La globalización también hará que la política empresarial cambie. Dávila pone el acento en la importancia de saber gestionar y retener el talento para hacer frente al empuje de otros países. Por su parte, Carlos Cabezón, responsable del área tecnológica de Adecco, asegura que la competencia de los países emergentes, de donde vendrán trabajadores con mayor cualificación, es muy fuerte, por lo que "la especialización será fundamental".

Las claves

La especialización ya es un aspecto crucial para encontrar trabajo, y lo será aún más en los próximos años. Según las investigaciones de Gratton, en el futuro veremos que las habilidades generales dejarán de valorarse como hoy. ¿Por qué? Porque será necesaria una diferenciación. "Si sólo tienes conocimientos generales, habrá miles o incluso millones de personas en el mundo que harán el mismo trabajo que tú, quizá más rápido, más barato y mejor", afirma la experta, mientras Dávila advierte de la importancia de la especialización porque "aportará valor añadido" frente al resto de trabajadores.

Para llegar a este punto, será fundamental la adquisición de conocimientos prácticos. Según Isabel Rodríguez-Tejedo, profesora de Macroeconomía de la Universidad de Navarra, el mercado laboral español tiende hacia la convergencia con el modelo anglosajón, "donde hay mayor peso del trabajador autónomo o freelance y cuya formación es mucho más práctica".

Por tanto, en un mercado de trabajo más centrado en los conocimientos prácticos, ¿sobrará la 'titulitis' actual? "Más que una formación o una titulación determinadas, se valorará la habilidad del trabajador para resolver proyectos y para adaptarse a los cambios futuros", advierte la responsable de Randstad. La profesora Rodríguez-Tejedo cree que en España tenemos una visión "distorsionada", por la importancia de los títulos, aunque cree que siempre será necesaria una base teórica completa.

Según los expertos, el concepto generalizado de empresa en España está obsoleto. "En el futuro habrá una cultura empresarial menos presencial, y más por proyectos u objetivos", afirma Carlos Cabezón. En ese sentido, la figura del autónomo o 'freelance' adquirirá mayor peso que hoy. "Este modelo de trabajador dará lugar a más productividad y más flexibilidad, pero también a una menor implicación que un trabajador de estructura", observa.

Con la mayor importancia del 'freelance' la profesora Rodríguez-Tejedo advierte que en el futuro se demandará más flexibilidad de horarios que hoy. Por su parte, Cabezón cree que estas transformaciones ayudarán a que los profesionales "empiecen a buscar cada vez más el control de su propia vida, intentado disfrutar de un tipo de trabajo que enriquezca también como persona".

Otro cambio irá de la mano de las experiencias personales. "Buscaremos un trabajo menos centrado en el salario y más centrado en el nivel de vida y las experiencias que aporta", afirma la experta Lynda Gratton.

Al fin y al cabo, el trabajo es uno de los aspectos más importantes de nuestra vida. Es donde pasamos gran parte de nuestra vida, donde podemos sentirnos creativos y realizados, o en el peor de los casos, frustrados y ninguneados.