El consumo de carburante es un «clásico» sobre el que los grandes fabricantes de neumáticos llevan insistiendo desde hace más de 15 años. Para el consumidor final, para el gran público, la relación entre neumático y consumo de carburante no es evidente : el portal de neumáticos Popgom.es te explica por qué:
¿Cómo un neumático puede reducir y reduce el consumo de carburante?
La explicación técnica es complicada, pero la demostración práctica es muy sencilla.
Ejercicio: monta en una bicicleta de carreras con 2 neumáticos de bicicleta normales y comprueba el esfuerzo que hay que realizar para recorrer 50 metros. Ahora reemplaza los neumáticos de esta bicicleta por unos neumáticos pesados VTT y constata el esfuerzo suplementario que supone recorrer los mismos 50 metros. Esta diferencia es únicamente debida al tipo de neumático, y la energía en exceso consumida es comparable al consumo de carburante superior en un motor.
Asimismo, podríamos realizar la prueba de comparar el esfuerzo necesario de recorrer 50 metros en bicicleta con los neumáticos bien inflados y los mismos 50 metros con los neumáticos con bajo inflado. El esfuerzo adicional ligado a los neumáticos se explica por un fenómeno que los fabricantes de neumáticos denominan «resistencia al rodamiento ». Cuanto mayor es la resistencia al rodamiento, mayor es el consumo de carburante.
Para un neumático de turismo, la primera fuente de ahorro de carburante procede de la correcta presión de inflado, que es la recomendada por el constructor del vehículo. Un bajo inflado de 20% supone un sobre-consumo de gasolina del 4%. La segunda fuente de ahorro de carburante procede de la propia resistencia al rodamiento de dichos neumático