viernes, enero 25, 2008

El rey Acaz

2 Reyes 16: 1-20

El rey Acaz, dice la Biblia, hizo lo malo delante de Dios. He leído este pasaje muchas veces y siempre me llama la atención como estos reyes se olvidaron de las grades obras de Dios en Israel en tan poco tiempo. Sin embargo cuando he leído a Acaz nunca me había detenido a pensar con detalle en el pasaje hasta que en mi estudio bíblico lo estudiamos esta semana.

El rey Acaz no le pregunta a Dios que hacer en tiempo de problemas con los estados vecino sino que decide confiar en su propia mente y decide pedirle protección al rey de Siria. Siria era una de los grandes reinos de aquel tiempo por lo que es normal buscar una alianza. Pero para Israel o Judá en este caso las cosas eran diferentes ellos debían primero preguntarle a Dios y confiar en Dios.

Para pedirle la alianza al rey de Siria Acaz sacó el oro del templo sagrado y de la casa real para regalársela a Siria. Esto por supuesto es prohíbo, es una desobediencia terrible, como se atreve a tocar el templo.

Acaz visita al rey de Siria. Durante su visita se fija en como el rey de Siria adora a sus dioses y aquí viene su caída total. Por alguna razón Acaz decide que él tiene que adorar de igual manera a Jehová. Así que manda ordenes que saquen algunos artefactos del templo y él va a adorar a Jehová en sus propios términos. Los hebreos tenían leyes estrictas sobre como adorar.

¿Y tu adoras en tus propios términos o en los de la Biblia?

Yo creo que todos tendemos a querer adorar a en nuestros términos en algún momento de nuestra vida. Dios nos pide que lo adoremos en sus términos no en los nuestros, ese fue mi aprendizaje de la lección.