Orígen del “Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer”

Las Hermanas Mirabal

En su libro “Tres Heroínas y un Tirano”, Miguel A. García habla de una conversación entre Minerva Mirabal y el dictador Trujillo mientras bailaban durante la celebración de 1949 en San Cristóbal, en un intento de seducirla: Trujillo: ¿Usted está de acuerdo con mi línea política? Minerva: No me interesa la política. Trujillo: ¿Y si yo le mando a mis súbditos para que la conquisten? Minerva: ¿Y si yo conquisto a sus súbditos?

Bajo la dictadura de Trujillo, en República Dominicana, estas mujeres, junto a sus esposos, eran reconocidas en todo el país por no haber claudicado nunca en su intento de restauración de la democracia y las libertades civiles en la nación.

En 1960, la OEA, condenó el accionar del dictador y mandó representantes a observar la situación del país. Trujillo entonces, ordenó que las mujeres detenidas en las cárceles fueran liberadas, incluso Minerva y María Teresa, pero no así a sus esposos.

El 25 de noviembre de 1960, tres de las cuatro hermanas Mirabal — Patria, Minerva y María Teresa — viajaron a Puerto Plata en el norte desde Salcedo para visitar a sus esposos quienes estaban detenidos en La Cuarenta. Ya era de noche cuando salieron de la cárcel y una tormenta había comenzado. Mientras viajaban por la carretera Santiago-Puerto Plata, que une las dos ciudades, su Jeep fue parado por del Servicio de Inteligencia de Trujillo.

• “Después de apresarlos los condujimos al sitio cerca del abismo donde ordené a Rojas Lora que cojiera palos y se llevara a una de las muchachas, cumplió la orden en el acto y se llevó a una de ellas, la de las trenzas largas (María Teresa). Alfonso Cruz eligió la más alta (Minerva), yo elegí a la más bajita y gordita (Patria) y Malleta al chofer, Rufino de la Cruz. Ordené a Pérez Terrero que permaneciera en la avenida a ver si se acercaba alguien que se pudiera enterar del caso. Esa es la verdad del caso. Yo no quiero engañar a la justicia ni al pueblo. Traté de evitar el desastre, pero no pude, porque de lo contrario (Trujillo) nos hubiera liquidado a todos.” Extracto de Ciriaco de la Rosa, de la Enciclopedia Dominicana, 1997, CD-ROM.

Fue de este modo que Patria, de 36 años de edad, Minerva, de 34, María Teresa, de 24 y Rufino de la Cruz fueron golpeados y apaleados hasta la muerte al lado de una ruta entre Puerto Plata y Santiago. Sin embargo, el asesinato de estas tres mujeres indefensas fue repudiado por la población nacional e internacional, comenzando así, el fin del régimen de Trujillo.

El Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe realizado en Bogotá, Colombia en el año 1981, resolvió que cada 25 de noviembre, en honor a estas valientes hermanas, se conmemore el Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer. No lo olvidemos.

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