El Eneagrama (del Griego «nueve símbolos») es actualmente un sistema de clasificación de las personalidades. El grafismo, sin embargo data de milenios antes de Cristo.
Un poco de historia
Los sufís lo utilizaban como un “instrumento de capacitación de los estudiantes en el trabajo interno y su capacidad para llevarlo a cabo”.
Es a partir del siglo XX cuando tras las investigaciones de Gurdjieff se empieza a considerar al Eneagrama como el sistema de los nueve tipos de personalidad, principalmente por los estudios de Oscar Ichazo y Claudio Naranjo.
¿Para que sirve?
A través del Eneagrama podemos encontrar nuestro tipo de personalidad y la forma que afrontamos nuestros problemas. También podremos comprender mejor a los que nos rodean.
¿En que se basa?
Una premisa para esta clasificación es que los seres humanos, aunque diferentes todos entre si nacemos a partir de una energía común, materializada mediante nueve cualidades o virtudes (esencias) inherentes a nuestra naturaleza:
Aunque poseemos las nueve hay una de estas esencias que predomina sobre las demás. Es nuestro yo verdadero.
Ocurre que pasan los años, y esa esencia con la que todos nacemos se va enterrando bajo lo que se denomina personalidad o falso yo. Esto es debido a la cantidad de información que recibimos por nuestros sentidos, al entorno hostil, a nuestras experiencias infantiles…
Las nueve personalidades según el Eneagrama son:
- El perfeccionista, el ayudador, el ejecutor, el romántico, el observador, el dubitativo, el epicureo, el desafiador y el indolente.
¿En que nos puede ayudar?
A partir de la comprensión de nuestro tipo de personalidad, podremos llegar hasta la esencia de nosotros mismos, rompiendo las barreras del ego que nos muestra la realidad bajo su prisma particular.
¿Que tiene de especial?
Lo atractivo del Eneagrama es que no solo describe los tipos de personalidad, sino que también las relaciones entre ellos. Y como nos descentramos en momentos de estrés prolongado hacia los patrones negativos de otro tipo de personalidad.
Y esto ¿qué tiene que ver con el ego?
Estos momentos de descentramiento, son cuando más egocéntricos nos volvemos ya que pensamos que la realidad no se adapta a lo que nosotros exigimos de ella y nos “auto boicoteamos” con pensamientos negativos y desagradables. Por mucho que nos sintamos identificados con nuestro ego, el ego NO es real…
El descentramiento es un proceso inconsciente. Sin embargo, centrarnos, volver a nuestro equilibrio es un proceso consciente y laborioso en el que se implementan pautas positivas para sentirnos bien con nosotros mismos y en definitiva felices. Para volver a nuestro equilibrio interior, a nuestra esencia deshaciéndonos del ego.
¿Donde puedo aprender más sobre el Eneagrama?
Aunque lo más adecuado para estudiar el Eneagrama y descubrir el tipo de personalidad propia es un taller vivencial, en el que se compartan experiencias, existen también muchos libros sobre el Eneagrama, algunos más teóricos (y ladrillo) que otros.
Si quieres que te recomiende uno muy sencillo de leer y en el que encontrarás los nueve tipos de personalidad y las nueve esencias muy bien descritas, éste es:
A mi me personalmente me ha encantado. De aquí es de donde está sacada “la esencia” para este humilde post.
También en los links anteriores de los investigadores, o en la web de la Aeneagrama.
Os dejo con un dicho sufí que me ha llamado mucho la atención, y que está relacionado con las personalidades y las esencias:
“Conviértete en lo que eras antes de ser, con el recuerdo y la comprensión de lo que has llegado a ser”
Susana Arostegui 
Muchas gracias por compartir informacion de la forma que lo haces claro y sencillo.
Publicado por olga | 14 julio, 2011, 5:05 pm