El día del Pilar estuve en Tavira, un pueblito del Algarve portugués que atesora, en su sencillez, maravillosos remedios para el alma cansada. Como la caracola guarda el eco de las olas, yo también quiero retener tanto la imagen como el asombro de aquel instante primigenio para volver a ellos tantas veces como precise. La contemplación de la belleza no es sino nostalgia de Dios.
(Luego he sabido que para que se produzca el milagro hay que llegar en el último barco de la tarde)
Bautismo
Salvación
Pneuma
Caronte
Docilidad
Trabajo
Humildad. Bajos fondos
Hogar. Imposible pero hermoso
Medida
Muerte
Olvido
Gloria
¡Poetisa! ¿Cómo has podido no escribir?
Tienes razón. No me resistía a colgar las fotos. Acompañaré, pues, las imágenes con poemas ajenos, que son mejores que los míos. Nada menos que del rey David. Ante tanta belleza, enmudezco.
No me has «entendío». La pregunta es… ¿cómo has podido no escribir durante tanto tiempo?
Tengo el gustazo de decir, que soy «la Pilar» que celebraba con Cristina su santo y contemplamos todas estas imágenes tan preciosísimas. Nos regalaron un día de luz radiante y además fue a la aventura, de esas veces que no has planeado casi nada de antemano y va desarrollandose el día según van pasando las horas…Y todo era Bueno!!! Fue un día sin prisas. Tenía tantas ganas de pasar un día asi.
Leí en algún sitio: De la misma manera que no se puede escribir deprisa, no se puede amar con prisas o rápidamente. La ternura es lenta, la prisa violenta. La prisa se opone a la ternura; no hay ternura apresurada. Ningún enamorado dice que no tiene tiempo para estar al lado de la persona amada. Quien ama no tiene prisa.
Y siiiiii tengo que decir que he descubierto otro poeta-artísta a mi lado…Gracias Cris, que ya me enrollé bastante
¡¡Bienvenida Pilipa!! Qué sorpresa encontrarte por aquí.
Realmente fue un regalo de día, y mira que pusimos dificultades…
Siguiendo tus consejos, creo que voy a cambiar de opinión: el primer camarero, aquel que no tenía prisa en atendernos, en realidad ni nos ignoraba ni nos despreciaba… ¡¡nos amaba!! Tendría que subir al blog el videoclip de la espera para reírnos un poco.
Gracias por ese «y todo era Bueno». En el Génesis encontramos el origen de la estética: el «asombro» de Dios ante su propia obra. Ante ese asombro y esa afirmación de la belleza creada, a los pobres mortales sólo nos queda la insatisfacción y la añoranza de plenitud. ¡¡Llegaremos!!
Alguien por ahí se me queja porque he sustituido unos sucintos comentarios personales a las fotografías por los versos del rey David.
No te engañes: no eran fruto de la síntesis poética, sino de la prisa.
Esta vez tuvo más peso la imagen que la palabra. Me parecía demasiado sobrecargar las fotografías que tomé con textos propios, por eso recurrí a los versos davídicos, aun a costa de caer en la cursilería o el remilgo de calendario parroquial. Creo que he mi intención ha sido sincera (y no me enfado…).
Aun así puedo estar equivocada. Y ahora que me estás haciendo pensar y que hablamos del Génesis, considero que quizá aquellas palabras escuetas con que bauticé las fotos bien podrían ser las de Adán al nombrar todas las cosas.
Te haré caso pues, pero sólo con aquellas palabras que me parecen acertadas y sin desdoro del rey David, al que dejaré donde está. A ver qué sale.
En cuanto a la pregunta de Agus, eso mismo me digo yo.
Creo que hay varios niveles de respuesta:
1. El más superficial, que la prosa periodística engulló la capacidad poética.
2. La prisa, enemiga de la contemplación.
3. Otras razones, en fase de superación.
¡Vaya, vaya, vaya!… ¡pues si que el día dio de si!, yo también estuve ese día y en esa Isla de ensueño, pero… ¡¡dentro de un bolsillo!! Así que doy las gracias a quien colgó las fotos que me ha dado la oportunidad de salir de la oscuridad… realmente son preciosas y de paso me uno al comentario de «la Pilar» que celebro ese día su santo…
Me alegro un montón de que lo pasarais tan rebién y felicito al camarero… por no tener prisa.
mi comentario está hecho pero me equivoque de website… sorry
Bendito error, Macgregor. Si quieres salir del bolsillo y volver a ver Tavira, ya sabes dónde tienes un periscopio.
Insisto, me gustó más la síntesis poética fruto de la prisa -o de la sencillez, chi lo sa. Escritura automática, maybe. Al menos en tres o cuatro de las fotos. Me gustaban más los minimalistas comentarios que las salmodias davídicas. Pero esto es lo que hay.
Me ha recordado lo que decía aquella chica sobre un cantante de «música cristiana», en plan bien: ¡no veas cómo salmodia!
Dejémoslo estar. Otra vez experimentaré con la escritura automática, aunque no confío mucho en ella. 😉
Vale, me has ganado.
No, no, la que nos has ganado eres tú.
precioso,… ¡no dejes de escribir!
¿cómo me has encontrado? 😉
Dando otra tuerca de vuelta (o al revés) 😉