Perfume de la Semana: Un Jardin en Méditerranée de Hermès

Tendiendo hacia los aromas poco conocidos y fuera de lo masivo, unas de las fragancias que tuve la suerte de probar la semana pasada es el "Un Jardin en Méditerranée" de la casa Hermès. Esta fragancia es parte de una trilogía de aromas inspirados en jardines del mundo (en este caso jardines de la costa mediterránea de Túnez y Turquía... las otras fragancias están relacionados con zonas verdes del Nilo y parajes de la India después de las lluvias monzónicas), en los cuales destacan los ingredientes de alta calidad que caracterizan a Hermès y se privilegia la asociación de mezclas de aromas con evocación de recuerdos y parajes más que la estructuración de notas de liberación ordenada en torno a una pirámide olfativa tradicional.


La fragancia comienza con una partida cítrica agradable de la familia de la naranja y la bergamota, más aromática que refrescante y alejándose del estilo de las agua cítricas veraniegas. Lo más interesante viene a continuación, cuando aparece gradualmente una nota de higo que va a dominar hasta el final, con variaciones entre tonos terrosos y frutosos misteriosos. Para quienes hayan probado el Salvatore Ferragamo clásico de hombre o el Marc Jacobs Men, de seguro reconocerán esta nota de higo que fue bastante innovadora a comienzos del 2000. Acompañando al higo figuran otras notas menores poco usuales como la flor de laurel que aporta tonos aromáticos al higo, más nuevas notas de naranja más cercana a la cáscara que al jugo o pulpa, en tonos más amargos y apariciones de una nota fría similar al mentol, producto de la mezcla de notas. En la fase final persiste el higo, pero en un tono más licoroso y maduro, con cierta tendencia a las maderas de árboles frutales. En las pruebas que realicé en papel la fijación fue bastante buena, sintiéndose algunas notas de madera dulce por cerca de una semana. Al probar en piel, en mi caso resaltaron más las notas de tierra en la partida y el higo con madera en la fase media y final.

La fragancia es bastante aromática, en un estilo frutoso neutro sin notas florales que lo hacen apropiado para un uso unisex, tomando características más masculinas en el comienzo y notas maderosas no agresivas ni secas hacia el final, que no quedan nada mal en una mujer. La fruta no se siente obvia, no es un aroma que alguien reconozca al pasar y diga genéricamente "rosas" o "frutillas", y es independiente de la época del año siendo fresca en verano y terrosa a la madera en invierno. En uso de oficina se siente limpia y aromática, agradable para espacios cerrados y suficientemente llamativa para marcar presencia y diferencia en un entorno social. Aguanta un uso nocturno, aunque más inclinado hacia el verano, y en el caso de los hombres de traje y corbata produce un efecto de oposición beneficioso, ya que aporta una nota más natural a un aspecto más formal y estático. Del hecho que sea unisex ya resulta agradable a ambos sexos, pensando en un uso romántico. Se le puede sacar buen provecho en un rango de edad entre los 25 y 45 años, ya sea en hombres o mujeres.

1 comentarios:

Andrea Martínez Maugard | 27 de mayo de 2008, 16:15

Me fascinan los perfumes y sus botellas, el otro dia pase 1 hora oliendo aromas hasta encontrar uno nuevo y original