lunes, marzo 24, 2008

24 de marzo

"Es un genocidio... genocidio culposo" comenzó anoche su programa, Hora Clave, Mariano Grondona. A horas de un nuevo aniversario del golpe de Estado supuse que se refería a los más de treinta mil desaparecidos, secuestrados, torturados y asesinados por el Proceso. Pero no, estaba hablando de las víctimas de accidentes de tránsito en Semana Santa. Extraña elección de término para un hombre que conoce y maneja a la perfección el lenguaje. Un hombre que, además, es cómplice de ese Proceso.
Escuché un par de minutos más y cambié, posiblemente en algún momento diría algo políticamente correcto sobre la dictadura, pero no sólo me enferma escucharlo sino que no estoy dispuesta a darle mi inexistente apoyo para su permanencia en los medios.
Como en cada aniversario de los últimos años hoy habrá actos, programas especiales, y mucha repetición de la palabra "memoria".
"Facultad psíquica por la cual se retiene y recuerda el pasado", dice la RAE. Perfecto, retener y recordar ese pasado que comenzó formalmente el 24 de marzo de 1976 y terminó el 10 de diciembre de 1983. Ni olvido ni perdón.
Pero hoy, 32 años después, aún hay desaparecidos de los cuales se desconoce su destino final, hay Madres que aún buscan a sus hijos, Nietos que continúan apropiados, Abuelas que los buscan, y genocidas libres.
Genocidas que gozan de sus vidas, su libertad o esa burla llamada "arresto domiciliario".
"Sin López no hay Nunca más" escribió una anónima mano en la esquina de mi casa.
Sin López, sin la historia de vida completa de cada desaparecido, sin la identidad recuperada en cada uno de sus hijos, y sin cada uno de los asesinos preso en una cárcel común, no hay Nunca más, porque aún no terminó.
A 32 años, mi incondicional respeto a las Madres, a todas ellas, sin quienes probablemente hoy sería un día sólo recordado por algunos, a las Abuelas, quienes no bajaron la guardia un sólo día con un único y claro objetivo, y a los Hijos que suman a la búsqueda de justicia, que traen aire fresco y vida, allí donde intentaron mutilarla.

9 comentarios:

Peste

Ese hombre, Grismar, antes que hombre es un sofista. Y un sofista al servicio de los jodidos: más que cómplice, herramienta.

Y es posible que yo también sea un jodido, porque en tres frases usé tres veces lenguaje deshumanizador, cercano al que se administra a quienes van a la guerra.

Si el nunca más tiene una base, sería todo un detalle saber cuál es (y no creo que sea esa quimera que llaman justicia).

Nacho

Hay veces que a los hijos y nietos se los encuentra, pero como están en manos de poderosos, de, digamos, dueños del multimedio más importante del país (y a este paso, pronto dueño del país mismo), se hace como si no se los hubiera encontrado.

1+

Muy adecuado post para una fecha que, al menos este año, devino mero feriado turístico. Lo de Grondona la noche del 23 supera mi límite de tolerancia... pero esa gente hace más de 32 años que supera impunemente todos los límites. Un beso.

Cinzcéu

Jamás me gustó la consigna "nunca más"; siempre me generó un sabor a "punto final" alfonsinista. Por las mismas razones, que acá se dan, me produce naúseas la política de "museo de la memoria" (dos veces el pasado en apenas dos términos) y, en la misma línea, la institución del feriado conmemorativo que rápidamente devino turístico, con la propia Presidenta vacacionando en su mansión de El Calafate. "Sin López no hay Nunca más", porque López está desaparecido, porque el aparato del Estado encubre (por acción u omisión) su desaparición y porque sus desaparecedores nos recuerdan que la cuestión sigue abierta y, ellos, tras 25 años de "democracia" y 5 de kirchnerismo, conservan suficiente poder. Lamentablemente, en este punto, los hijos de puta tienen razón: mientras el Gobierno (y no sólo) vende sus empeñosos espejismos de museo, memoria e historia, los asesinos sueltos se envalentonan al abrigo del propio Estado. Porque aún no terminó.
Un beso.

Grismar

Peste: es verdad, ese hombre es un sofista, y con sus trampas dialécticas logró posicionarse, y es verdad que es una herramienta de los jodidos. Pero prefiero considerarlo un partícipe necesario, un cómplice, el término herramienta tiene un dejo de involuntariedad, de simple objeto cuyo accionar depende de otros, y este jodido hombre participó activa, conciente y voluntariamente en un genocidio (entre otras cosas).
La justicia, como bien decís, es una quimera, como la felicidad, pero marcan una dirección. Obviamente es para debatir milenios, tipos como Almirón aún sostienen que los 1500 asesinatos de la triple A eran "justos". El "Nunca más" traducido en "que no se repita" está plagado de agujeros. Saludos.
Nacho: quiero creer que ese "se hace como si no se los hubiera encontrado" se refiere a los medios y cierto poder, y no a Madres y Abuelas. Las pruebas de ADN, única forma de establecer sin duda alguna los lazos de sangre, no son obligatorias (excepto por orden judicial) y ningún posible hijo de desaparecido tiene obligación de hacerla. Ni las Abuelas de obligarlos sino de respetarlos e intentar que por sí mismos deséen conocer sus orígenes. Algunos nobles hijos han de tener la cabeza demasiado cagada como para acceder a hacerse un ADN, pero no porque Abuelas no lo hubiese intentado. Saludos.
1+: de lo de Grondona la noche del 23 no puedo decir más que lo que dije, ya que no pude seguir escuchándolo, pero, como decís, hace más de 32 años que supera todos los límites, digamos que hace más de 50. Un beso.
Cinzcéu: comparto tus náuseas ¿qué más muerto y cerrado que un museo? los 30 mil desaparecidos, sus vidas y sus hijos no merecen ser parte de un museo, sino de juicios y castigos a sus asesinos. Un beso.

Nacho

Grismar: por supuesto que no critico a abuelas ni a madres por esto, su labor es un ejemplo. Me refería al silencio cómplice que hay en los medios efectivamente. Y está muy bien lo que decís al final: "Algunos nobles hijos han de tener la cabeza demasiado cagada como para acceder a hacerse un ADN, pero no porque Abuelas no lo hubiese intentado." Retribuyo los saludos.

SirThomas

No tenía mucho para comentar, más allá de recordar la fecha, digamos... pero ayer me encontré en una situación shockeante, por así decirlo. Resulta que fui a la casa de un amigo y su padre, viendo un informe en TVR sobre el recordatorio al Golpe y luego el de las Malvinas, me dio a conocer su posición y dijo que "antes con los militares había más seguridad, hay muchos que quieren que vuelvan"... me quedé sin palabras. Digamos, está claro que esa idea está presente en algunas gentes, sobre todo gente "mayor", pero no me había tocado de vivirlo así de cerca (?).

Me limité a decirle, aparte de estar en contra de la dictadura, por razones más que obvias, que prefería a los políticos antes que a ellos y él lo contrario.

En fin...

Saludos.

Grismar

Nacho: sí, supuse que lo decías en ese sentido, sólo que el "se hace" se prestaba para la doble lectura, y en algunos temas soy bastante insufrible y prefiero que queden claros sin lugar a dudas. Saludos.
sirthomas: lamentablemente hay muchos que opinan así, desde basuras como Elena Cruz que defienden el Proceso con los argumentos más fachos hasta versiones endulzadas del tipo "si no fuera por los desaparecidos no hay dudas de que estábamos mejor con los militares". Me pregunto qué sentirá tu amigo escuchando a su padre decir algo así. Saludos.

SirThomas

Bueno, no estaba muy de acuerdo, pero es el padre, que se le va a hacer. Tampoco me quise extender en la discusión ahi en la mesa, en parte por mi shockeo y en parte por la seguro que estaba el señor en sus pensamientos. Preferí dejarlo pasar, para no provocar un mal momento extendido, digamos.

Saludos.