domingo, 21 de febrero de 2010

Visita por el continente africano




Enero 2009

Llegué el miércoles 7 de enero a Panama (ahora me parece como si fuera hace un mes, y apenas fue hace 10 días), para trabajar con el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Del aeropuerto me llevaron a la casa de mi colega (jefa, a la cual conocía de antes), y de ahí a las instalaciones de Naciones Unidas, en la Ciudad del Saber. Bueno, pues llegando y ya me tenían asignada una oficina, computadora, claves, etc. Ese día empecé a llenar como 10 formularios, es increíble, llené y llené formularios que no se imaginan. Ah, una de las asistentes me dice: Miss Cinthia

Al día siguiente salimos 3 personas de la oficina a esta reunión en Kenya. Allá en Kenya eran como dos mundos. El primero es el de los diplomáticos y funcionarios de Naciones Unidas, que viven en grandes casas, con muchos cuartos, cada cuarto con su baño, grandes patios, choferes, empleadas y cada casa tiene sus guardas. A como se toman el tema de seguridad, todo parece indicar que el país es inseguro, por los guardas, cercas eléctricas, alarmas, etc., pero la verdad yo nunca me sentí insegura. Tal vez sea el hecho de que en ese submundo no se ve el día a día de los lugareños, excepto los que trabajan para los diplomáticos y funcionarios NNUU. Y bueno, el otro mundo es el de los lugareños, que no llegué a conocer, ahí deben de vivir en casitas muy pobres, y ver cómo sobreviven el día a día. Los alquileres y supermercados en el mundo rico, son como del "primer mundo".

Las instalaciones de NNUU son super grandes, son varios edificios, y a cada uno se le asigna una letra del abecedario como nombre, también están conectados unos con otros. Yo me pegué grandes perdidas. La reunión estuvo bien, aunque es un paso extraño pasar de Estado Miembro a Secretaría. Ya como el 3er día me cansé de conocer gente y de hacer amistades. Resultaba que ahora la gente que había conocido en Panamá eran como mis viejos amigos (y solo tenían como 2 días más de conocer jajaja), y la gente que conocí en Kenya eran nuevas amistades. Como ven, todo fue muy acelerado. Las reuniones una tras otra. Reclutaron a uno como yo en cada región, y ent nos tuvimos que quedar unos días más después del primer taller para que nos explicaran el detalle de lo que hace cada división. Mi conclusión es que lo único ahorita que tengo claro, es que no tengo nada claro!! Me da la impresión que voy a tener que trabajar mucho, y tengo que leer bastante para poder hacer un buen papel.



Pero bueno, volviendo al tema de Kenya, las calles en cuanto a calidad, son como SJ, osea, con uno que otro hueco, pero ellos no las tienen señalizadas (y con esto no me refiero a nombres, sino que no marcan los carriles, flechas y como sabrán, desde que me volví motorizada pongo más atención a las calles). Además, me parece que no hay transporte público intra-ciudad (osea, tal vez sí como quien dice de Guanacaste a SJ, pero no de Pavas a SJ centro), pues uno ve a las orillas de las calles a la gente camina que camina, y yo nunca vi un solo bus. Lo malo es que no tienen aceras, así que la pobre gente cuando llueve, se embarriala toda. Por supuesto esta gente que me refiero, son la gente bajos recursos, pues los otros (ricos, diplomáticos y funcionarios NNUU) tienen todos sus carros. Yo me quedé donde una peruana amiga de una de las colegas con la que fui, que le preguntó a su amiga si podía quedarme también en su casa. El país tiene serios problemas de escasez de agua. Viene como dos o tres veces por semana (con suerte), y se llenan los tanques de las casas, y ahí rece para que le rinda hasta la próxima. Cuando llegamos (sábado), nada que había vuelto el agua, y había que rendirla y escoger cuál día bañarse. Además, el tanque de agua caliente era el último en llenarse si volvía el agua, y también el primero en vaciarse. El domingo tuve que escoger si me bañaba domingo o lunes (con balde). Me pude dar un baño relativamente decente hasta el miércoles. Los otros días era con un balde de agua calentada. El día que volvió el agua a Nairobi, todo el mundo se mandaba mensajitos de alegría unos a otros, el equivalente a "Feliz año" pero más bien "Feliz baño!! Volvió el agua".


También un tema de conversación en este submundo es el de las empleadas domésticas. Es todo un tema, pues por el acuerdo con el país sede, la gente no puede traer sus propias empleadas, sino que se busca dar empleo a los locales. Entonces imagínense a esa pobre gente que viene de mini-casitas o chocitas a pasar a ser las empleadas de esas casotonas, y en algunos casos, empleadas que nunca en su vida habían visto una tasa de baño (escusado). Entonces es como enseñar hasta lo más básico, y por supuesto eso resulta muy cansado para las familias, y a muchas les da miedo dejar a sus hijos pequeños en manos de una persona que ni siquiera saben si va a poder llamar a la policía en caso de una emergencia. Ah, y ni se diga del ritmo…. Ahí no hay prisa.

El domingo al día siguiente de que llegamos fuimos al Parque Nacional de Nairobi, con un taxi. Fuimos mi colega y yo con los dos chiquitos de la casa donde estábamos (hijos de peruana e italiano, y hablaban super bien el ingles, español e italiano. El chiquito tiene 7 años y la chiquita 10 años). Uno entra con el carro y va por una calle lastre, sin bajarse, para ver a los animales en su habitat natural. Ahí vimos una jirafa, zebras, búfalos, y no me acuerdo qué más, era como medio día y la mayoría de los animales se estaban resguardando del calor. Y hablando de clima, es caliente de día y frío en la noche, en un solo día las temperaturas pueden oscilar entre 12 a 30 grados. Luego ahí mismo estaba el zoológico, y uno de los cuidadores nos ofreció meternos a la jaula de los chitas y tocarlos (eran dos). Por supuesto los chiquitos fascinados. A la salida de la jaula pues les dimos una "donación" a los tipos del parque, y entonces por eso nos llevaron a un lugar prohibido para visitas, para ver al bebé chita, que estaba en una jaulita. Como 3 días después, estábamos recordando la visita al zoológico, y el chiquito (Gianluca) empezó a contarle a sus papás que había tocado al chita, y el papá le decía: "Metiste la mano en la jaula del chita?", y el chiquito le decía "no, entré a la jaula" "Ah, y a cuántos metros lo viste?" Gianluca piensa su respuesta y con el dedo índice y pulgar dice "Cuánto es esto?" Y en sus deditos estaba señalando cuánto era un milímetro "Que te digo papá, yo toqué al chita, era mansito". Hasta que vi la cara del papá entre sorprendido e incrédulo, fue que me di cuenta de que HABIAMOS METIDO A LOS CHIQUITOS A LA JAULA DEL CHITA!!! No se me había ocurrido que podía haber sido algo peligroso…. Pues nada más me hice la loca, como si fuera también una oyente ajena a la historia. Creo que esas fotos no se las vamos a mandar. Y bueno, Gianluca seguía contando de su experiencia cercana con los chitas y del bebé chita, y le preguntaba a la mamá que cómo el papá chita y la mamá chita tenían un bebé chita si no se habían casado. La mamá le explicó que los animalitos no se casan, y que el "frijolito" le habia crecido a la mamá chita, y ent preguntaba él con preocupación que cómo llegó el frijolito a la mamá "cómo mamá, cómo?? Si no se han casado?". Bueno, pues mi amiga tuvo que cambiar de tema y decirle que fueran por su baño.

Fue bonito ir, y lo vacilón es que llegué sin conocer a nadie, y a mi partida me ofrecieron hospedaje como en 3 casas para cuando vuelva.


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