jueves, noviembre 17, 2005

Breve del Jueves : ¿Quién es Al Qaeda?

¿Es Al Qaeda un grupo de árabes dementes que viajan por el mundo buscando la manera de golpear los intereses norteamericanos?. Definitivamente no, aunque sea la imagen que la Casa Blanca desea vender para justificar la frenética persecución de sus acérrimos enemigos (no tenían uno desde la URSS) , arrasando con ello a países enteros , donde (casualmente) instala gobiernos serviles a sus intereses y muy poco preocupados en reestablecer la democracia en esos "reinos del terror". La mala noticia para Washington es que la coartada "Blame Al Qaeda" está perdiendo validez a pasos acelerados gracias a los sangrientos atentados que sacuden cotidianamente diferentes partes del mundo. El error en la concepción de la naturaleza de la peligrosa organización terrorista ha dejado en ridículo al gobierno estadounidense y sus "cruzadas" contra el terror , mostrado practicamente indemne a los ejecutores de los atentados del 11 de Septiembre de 2001 , pese a la caída de el régimen Talibán y de Saddam Hussein, mientras los niveles de aceptación de George W. Bush se desploman en caída libre y la población norteamericana comienza a pedir cuentas de las conflagraciones en las que su presidente les hizo creer se daría un golpe letal al terrorismo. La lectura de Al Qaeda es mucho más compleja que la realizada a la fecha, radica principalmente en el fenómeno mundial de migración árabe. En muchos países la comunidad árabe es perseguida y marginada, en gran parte por el poder económico y político de las élites judías a lo largo del orbe. Los árabes constituyen una auténtica subcultura en muchos países del mundo, con el islam como hilo conductor soportan las visicitudes del violento choque entre su idiosincracia y la del hombre occidental. El terrorismo le proporciona a muchos jóvenes musulmanes sumidos en la desesperación una doble gratificación psíquica: Por un lado le da a su vida un sentido de trascendencia a través de la inmolación ritual (en coincidencia con las enseñanzas del Corán) , por el otro le ayuda a vengarse simbólicamente de los dos países a los que considera culpables de su desgracia: Israel y EU. Ese sentimiento es el que Al Qaeda ha sabido catalizar y que aunado con los avances en los medios de comunicación electrónicos le da a la organización de Bin Laden una enorme capacidad operativa mediante células dispersas alrededor del mundo , apoyadas en logística por el grupo central , pero con independencia en su accionar bajo las órdenes de líderes regionales. Un esquema mucho más poderoso y flexible que la guerra centralizada , orquestada en los cuarteles de Washington.