Nunca dejes de sonreir

Este poema lo hice con unas amigas de Alemania:

 Siempre tiene que haber malos momentos en la vida,
sinó no sabemos apreciar los buenos.
 Y esos buenos momentos ya llegarán
y hay que saber disfrutarlos
y dejar los malos atrás.
Hay un camino de la esperanza
que hay que encontrar
y luego seguir,
pero nunca te rindas.
Nadie merece la pena
para que dejes de sonreir,
nadie merece que derrames una lágrima.
Y esas personas que sí lo merecen no te harán llorar.
Nunca dejes de sonreir,
aunque estés triste
porque alguien se podría enamorar de tu sonrisa,
alguien que lo merezca.
  Adelaida Pasch

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