lunes, 20 de junio de 2011

El sabio rey Salomón


LA SABIDURÍA DE SALOMÓN

Dos mujeres comparecieron ante el rey Salomón con dos bebés, uno muerto y otro vivo. Ambas mujeres afirmaban que el niño vivo les pertenecía, y decían que el muerto pertenecía a la otra. Una de ellas declaró:

-Oh señor, ambas dormíamos con nuestros hijos en cama. Y esta mujer, en su sueño, se acostó sobre su hijo, y él murió. Luego puso su hijo muerto junto al mío mientras yo dormía, y me quitó el mío. Por la mañana vi que no era mi hijo, pero ella alega que éste es mío, y que el niño vivo es de ella. Ahora, oh rey, ordena a esta mujer que me devuelva mi hijo.

La otra mujer declaró:

-Eso no es verdad. El niño muerto le pertenece, y el niño vivo es mío, pero ella trata de arrebatármelo.

El joven rey escuchó a ambas mujeres. Al fin dijo:

-Traedme una espada.

Le trajeron una espada, y Salomón dijo:

-Empuña esta espada, corta al niño vivo en dos y dale una mitad a cada una.

Entonces una de las mujeres exclamó:

-Oh mi señor, no mates a mi hijo. Que la otra mujer se lo lleve, pero déjalo vivir.

Pero la otra mujer dijo:

-No, corta al niño en dos, y divídelo entre ambas.

Entonces Salomón declaró:

-Entregad el niño a la mujer que se opuso a que lo mataran, pues ella es la verdadera madre.

Y el pueblo se maravilló de la sabiduría de ese rey tan joven, y vio que Dios le había dado discernimiento.

La Biblia



Cuando niña siempre hojeaba un libro grande que tenían mis primos, su tapa era de un color amarillo muy chillón, con letras imprenta, cursivas de un color rojo brillante. En ese libro habían ilustraciones donde se narraban las historias más sorprendentes que el hombre podría conocer, el gran pez que se trago a Jonás y aun así sobrevivió, o los animales que de dos en dos metió al arca Noé, pero hubo una historias que me marco, no sé si por la dureza del sirviente del rey Salomón que sostenía a un niño de un pie dispuesto a córtalo en dos, o por los rostros duros y decididos de las dos madres, cada uno con un deseo diferente, pero en virtud del mismo objetivo, el conseguir el poder sobre ese niño, no recuerdo quien de los adultos de mi casa me explico el sentido, pero ahora veo que el gran Salomón está presente en cada uno de los conflictos que hoy vivimos, día a día las pruebas se nos presentan de una forma increíble, y me he dado cuenta que con soberbia y egoísmo pocas veces llegamos a buen camino, teniendo en cuenta que los intereses solo privilegian nuestro sentir, así como la madre que deseaba partir en dos al niño vivo, olvidando por completo que si lo dividían en dos ninguna de las dos tendría la oportunidad de ser madre, ahora mi decisión es simplemente dar un paso a lado y ser como aquella madre que sacrifica su vinculo, ese vinculo que ante toda prueba sigue presente, el que independiente de donde este ese niño, en donde crezca, esa madre siempre sabrá que es su hijo, y que lo dio sin pensarlo dos veces para brindarle la posibilidad de vivir, de disfrutar de la vida, de tener un futuro fecundo, un futuro sin restricciones, un edén prometido.
Buen camino a mi linda gente no es un Adiós si no un hasta pronto y espero este Salomón algún día me devuelva el niño que deje ir con esa madre.


Sita Yani's

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