TENDINITIS CALCIFICANTE


Paciente mujer de 31 años de edad que trabaja en su domicilio como ama de casa, y que consulta por dolor en su hombro derecho dominante de comienzo progresivo, sin recordar un accidente o traumatismo desencadenante, desde hace 2 años. Consultó con su médico de cabecera siendo tratada mediante analgésicos y antiinflamatorios sin observar mejoría. Posteriormente acudió al especialista que le aplicó una terapia combinada consistente en 2 infiltraciones seriadas de corticoides con una semana de intervalo, y posteriormente siguió tratamiento en rehabilitación basada en ultrasonidos, electroterapia y fuente de calor. La paciente observó una discreta mejoría transitoria durante algunos meses, pero tras la vuelta a su actividad habitual el problema reaparece.

Cuando la paciente es interrogada, refiere que el dolor se presenta sobre todo durante la noche, y lo localiza en la porción más alta de su brazo derecho. No refiere dolor cervical o adormecimiento de su mano. La paciente es capaz de peinarse con cierta dificultad, y sobre todo no es capaz de llevar su mano a la espalda para abrocharse el sujetador. También refiere que en ocasiones nota un chasquido audible en el hombro al elevar el brazo. En la exploración se objetiva una exacerbación del dolor al elevar el brazo por encima del hombro hacia adelante y hacia lateral tanto al hacerlo de forma activa como pasiva. La movilidad pasiva es casi completa, salvo la rotación interna que es muy dolorosa. El estudio radiográfico demuestra una imagen de calcificación de aproximadamente 4 mm de diámetro en el espacio subacromial. Un estudio de RMN ulterior demuestra la localización exacta de dicha calcificación, que está incluida en el interior del tendón supraespinoso sobre su inserción distal y que obstruye su deslizamiento bajo el espacio subacromial. Además secundariamente presenta signos de inflamación en la bursa subacromial y un estenosamiento moderado de este espacio a expensas del reborde anterolateral del acromion o margen mas exterior de la escápula.

El diagnostico de sospecha se confirma con la RMN : tendinitis calcificante cronificada del tendón supraespinoso del hombro derecho. Dado el largo tiempo de evolución y la falta de fructificación del tratamiento conservador se aconseja a la paciente la intervención quirúrgica mediante la descompresión subacromial y resección de la calcificación por medio de una artroscopia de hombro. La intervención es llevada a cabo bajo anestesia general y bloqueo nervioso interescalénico. Se practica la extirpación de la masa calcificada a través de una cánula de artroscopia, se extirpa material bursal y se amplía el espacio subacromial, mediante una acromioplastia, aumentando la distancia entre la cabeza humeral y el acromion que conforman el túnel por donde circula el tendón lesionado. La paciente es dada de alta hospitalaria a las 6 horas de la intervención y sigue un programa de ejercicios de fisioterapia.



La mejoría del dolor es significativa desde el primer día del postoperatorio, no precisando analgesia a los pocos días de ser intervenida. La recuperación de la movilidad de la extremidad se produce de forma útil al mes de la intervención y de forma completa a los 3 meses de la intervención.

Comentario: La tendinopatía crónica calcificante del supraespinoso es una causa frecuente de dolor en el hombro en sujetos jóvenes y activos, con larga evolución de sus síntomas (almenos 12 meses). Su característica particular que la diferencia es la formación de un tejido de aspecto lechoso que resulta radioopaco en las radiografías y que suele aparecer en el interior del tendón lesionado. Su origen no está aclarado, todavía hoy. Este material se comporta como un cuerpo extraño que obstruye el paso del tendón a través del espacio subacromial y provoca su lesión y cronificación del problema. Su extirpación suele ser suficiente para aliviar los síntomas, y combinando ésta con la descompresión de la zona mediante la acromioplastia el porcentaje de éxito del tratamiento es muy elevado.